Unidos en la misión: comunicación interna en una ONG
En nuestro post «Ser y hacer: el caso de Fundación Vida Silvestre» describimos cómo colaboramos desde la CI con el «funcionamiento del engranaje» de Fundación Vida Silvestre Argentina (FVSA). Hoy te contamos cómo la comunicación interna ayuda a que una organización, aún sin fines de lucro, alcance sus objetivos.
En el momento en que iniciamos nuestro trabajo con la Fundación, al comulgar con su misión (la preservación de la fauna y flora de áreas protegidas), decidimos hacerlo pro bono, con el fin de extender la disciplina. A lo largo de estos años de apadrinamiento, acompañamos el desafío de lograr un proyecto más pujante, con áreas más integradas y procesos más ordenados.
Comunicar en una ONG
También en las organizaciones no gubernamentales (ONG), la comunicación interna adquiere gran relevancia. Las recorre transversalmente, facilitando la efectividad de su razón de ser. Y como elemento de integración, permite la coordinación de los agentes en orden al objetivo común.
Sabemos que no existen soluciones generales. La naturaleza y modelo de gestión determinan cómo encausar la comunicación interna en cada una de ellas. Sin embargo, podemos decir en qué se asemejan la mayoría de las non profit: sus miembros se comprometen con el objeto social que los reúne, asumiendo un especial sentido de pertenencia. De ahí, la importancia de que cada uno sea consciente de su lugar en la cadena de valor, y de cómo su trabajo aporta a los otros sectores para que la organización logre su fin. Frente a esta meta, la integración es fundamental.
Este es un issue recurrente en las compañías. Las áreas suelen aislarse, no comparten su información ni conocen qué está pasando en los sectores vecinos. En particular, en el relevamiento de FVSA surgió que el proceso de comunicación necesitaba ser reforzado. Si bien había herramientas, no existía la conciencia de que cada uno era clave en la comunicación interna, y responsable de ella.
¿Cómo sumamos nuestro granito de arena?
Las instancias de integración ya instauradas eran los cumpleaños (dos festejos por año) y una reunión de fin de año. En este marco, propusimos a FVSA transformarlas en espacios lúdicos, atados a un sentido en particular vinculado con el objetivo comunicacional, posibilitando la interacción desde otro lugar que no fuera simplemente un encuentro informal. ¿El objetivo? Que se divirtieran, interactuaran y se conocieran de forma más profunda entre ellos mismos y a la Fundación, con la brújula siempre apuntada a los focos propuestos previamente: “Orgullo de pertenencia: ser silvestres” (quiénes somos); “Hay equipo” (la importancia de la cadena de valor); “Nuestro norte” (hacia dónde vamos).
El desafío fue generar más eventos de alto impacto con bajo presupuesto. Entonces, diseñamos acciones diferentes para cada ocasión, cuyo contenido siempre estaba vinculado al objetivo central de la ONG. Una de las propuestas fue una búsqueda del tesoro con pistas en la vía pública. En otra oportunidad fuimos a una reserva. Allí realizaron juegos con prendas y una actividad sobre los valores de la institución. Para otra ocasión dimos pistas sobre características particulares de cada integrante de la Fundación. Invitamos a un caricaturista para que los retrate, plasmando estos diferenciales que cada uno trae a FVSA todos los días. Y no faltó la competencia de preguntas y respuestas al estilo «Lo sabe, no lo sabe».
El sabor de una buena comunicación interna
Los efectos fueron más que positivos. Porque cuando uno puede ponerle cara a ese nombre en el mail, o un nombre a esa cara que se cruza en el pasillo, y tiene que trabajar con él, lo hace de otra manera. Termina siendo el compañero con el que estuviste atado en una carrera de tres pies.
Hoy, mirando hacia atrás, vemos que la comunicación mejoró gradualmente. Año a año confirmamos que, con pocos recursos, pero conociendo a los colaboradores, sus necesidades comunicativas y motivacionales, se pueden lograr grandes cambios. A esto se le suma una observación de la Gerente de Comunicación de FVSA: la intervención de un tercero da un sabor diferente a estos eventos.