La comunicación en vivo: la hora de la verdad
Sabemos que la tecnología avanza. Que hay miles de nuevos diseños hermosos y llamativos por explorar. Que las carteleras ahora son digitales, tienen movimiento y la posibilidad de incluir videos. Que el e-mail es comodísimo porque solo implica apretar un botón para que llegue a toda nuestra audiencia. Y que si el mensaje tuvo algún error, se corrige en un siguiente mail, se vuelven a imprimir los diseños, se modifican las carteleras. El paraíso de la comunicación.
Sin embargo, no debemos perdernos nunca en este mundo tan maravilloso de los vehículos mediatos (llamamos así a aquellos canales de comunicación en donde media algún soporte entre quien comunica y su audiencia). Porque deslumbrarnos con ellos implicaría olvidar la importancia de la palabra hablada, del cara a cara, de la comunicación frontal, inmediata. Y está probado que esta es la más eficaz de todas, sobre todo cuando aquello que se necesita comunicar es algo verdaderamente importante, que requiere de compromiso real por parte de los colaboradores. También se sabe que esta comunicación es “one shot”; la impresión que se le dé a la audiencia no podrá ser modificada tan fácilmente, pero ahí radica el poder de la palabra hablada; si la utilizamos bien, la penetración del mensaje será enorme.
A raíz de este tema les compartimos a continuación un artículo de “Perspectivas wellcomm de la comunicación 2016” publicado por la consultora Wellcomm y escrito por Gloria Campos, directora general en el Instituto Superior de Protocolo y Eventos. Para leer todo el compilado de artículos, ingresar aquí.