#CIenZapatillas: Florencia Giaquinta

Se llama Florencia Giaquinta, pero le dicen Luli. Es Consultora en Comunicación Interna desde hace 10 años, pero parece más. Actualmente se desempeña como ejecutiva de cuentas y coordinadora de medios digitales en Vector C y como docente universitaria en la materia Comunicación en la Empresa. Omnipresente. Formada. Ejemplar. Hoy (y casi siempre), en #CIenZapatillas.
Si trabajás en Comunicación Interna en alguna empresa, ONG, consultora o entidad educativa y querés participar de esta sección, ¡esperamos tus respuestas! Podés enviárnoslas a info@vectorc.com.

¿El medio es el mensaje?

100% de acuerdo con McLuhan. Obviamente que el contenido es superimportante, pero un excelente contenido en un medio equivocado está totalmente desperdiciado (o puede causar un efecto distinto al intencionado). Pensémoslo fuera del ámbito de la Comunicación Interna: mi forma de decir las cosas va a ser tan (o más) determinante para el otro como aquello que le esté diciendo. A través del medio que elija puedo comunicar cosas tan distintas como que el otro me importa mucho, o en el extremo opuesto, que lo desprecio (aunque le esté diciendo literalmente, con mis palabras, cuánto me importa). El medio es definitivamente parte del mensaje. Si esto no fuera cierto, caería más de un axioma de la comunicación.

¿Una imagen vale más que mil palabras?

En cuanto a impacto, sí. En cuanto a importancia, definitivamente no. Ambas se complementan; la palabra debe estar siempre presente para orientar la interpretación de las imágenes (para que el impacto sea el buscado). Y de ahí, por ende, la importancia del trabajo del comunicador interno, que deberá seleccionar perfectamente las palabras que acompañen cada imagen.

¿Cuál es el desafío del comunicador interno?

Pienso que se trata de algo que en principio parece simple, pero no lo es: lograr poner en palabras aquello que los líderes tienen en sus mentes, pero que no encuentran la forma de expresar correctamente al resto de la organización. Y luego, por supuesto, buscar la mejor manera de distribuir aquellas ideas entre los distintos públicos y a través de los vehículos más adecuados.
Con esto no estoy diciendo que los líderes no sepan comunicarse, pero muchas veces el rol del comunicador interno es intentar ordenar sus ideas para extraer las más importantes, y a partir de aquellas poder establecer los focos de la CI.

¿Qué es lo más importante en Comunicación Interna?

A riesgo de quedar reiterativa (porque casi todos los colegas que han pasado por #CIenZapatillas han dado una respuesta similar), la escucha es fundamental. La escucha nos dará el pulso de la compañía, nos permitirá establecer un diagnóstico desde el cual partir para construir todas nuestras comunicaciones. Sin escucha no hay Comunicación Interna, hay solamente emisión vertical de información.

¿Qué consejo le darías a alguien que recién empieza a trabajar en Comunicación Interna?

Primero, que el comunicador interno no debe saber todo, así que, ¡relax! Lo importante es poder saber a quién consultar sobre cada tema; tener aliados. Entonces, en segundo lugar, le diría que pregunte y repregunte (¡la escucha, nuevamente!), que se asegure de haber interpretado de forma correcta aquello que hay que comunicar, cuál es el objetivo de dicha comunicación, qué impacto se quiere lograr, etc. No es lo mismo “que los colaboradores sepan” que “que los colaboradores recuerden” o “que los colaboradores hagan”. La alineación de expectativas es fun-da-men-tal a la hora de determinar un objetivo de Comunicación Interna.

¿En qué otra área te hubiera gustado trabajar si no fuera Comunicación Interna?

¡En Asuntos Corporativos! Rechacé mi primer trabajo en una multinacional en el área de RRHH (donde los reclutadores, luego de como 6 entrevistas, “me vieron pasta”) porque yo solamente quería formar parte del área de relaciones institucionales de la empresa. ¡Desconocía totalmente el mundo de la CI! Y ahora que lo pienso, gran ojo el de esos reclutadores.

¿Una frase de menos de 140 caracteres que se te ocurra en este momento?

“Calmate, Florencia”. Me la digo todo el tiempo como un mantra. (Me) funciona. (A veces).

“Lo más importante de la comunicación es escuchar lo que no se dice”. ¿Qué pensás?

Creo que esta respuesta es un poco una combinación de dos de mis respuestas anteriores. Primero, que en Comunicación Interna la escucha es importantísima. Y segundo, que si todo comunica y el medio es parte del mensaje (cómo digo algo), eso también está comunicando aunque no explícitamente. Y puede ser clave para interpretar correctamente aquello que nos estén diciendo (si es cierto, si están convencidos, si hay dudas, si nos mienten). Ese “cómo” también debe ser escuchado.

Ping pong final: Por favor, elegí una (¡o más!) de las siguientes preguntas y contestala.

¿Mate, te o café? Café, si es con latte art en mi cafetería preferida del microcentro (donde suelo pasar hooooras trabajando cuando necesito cambiar de aire), mucho mejor.
¿Cuál es tu frase de cabecera? El que avisa no traiciona. ¿Suena medio mafioso? ¿Será que soy de familia siciliana?
¿Madrugar o trasnochar? ¿Un punto medio, como dormir hasta las 11, no puede ser?
¿Un superhéroe? Nunca fui de pelis o libros de superhéroes, por lo que en el sentido literal de la palabra, no tengo ninguno. Héroes, en cambio, sí: mis abuelos.
¿Una cábala? Cuando viajo, entrar a los aviones con el pie derecho.
¿Un toc? Ay, si confieso esto acá van a enterarse de que estoy re loca jaja. A ver cómo lo explico: si para hacer algo tuve que girar media vuelta hacia la derecha, por ejemplo, luego tengo que girar exactamente la misma cantidad de grados hacia el lado contrario porque si no siento que algo queda “desbalanceado”. Por eso a veces me verán dando vueltas medio sin sentido. Ahora ya entienden XD.